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***No tienen agua potable para el lavado frecuente de manos, y para ir al baño, las niñas y niños deben salir del plantel e ir con alguna vecina que les preste su servicio***
NUEVO LAREDO.- Niñas y niños de la Colonia Los Artistas, toman clases de primero a sexto grado en un mismo salón, que es un cuarto en obra negra, sin puertas ni ventanas.
Sentados en sus pupitres, junto con perros callejeros que entran y salen a su antojo, los niños deben salir de la escuela para ir al servicio sanitario, porque al no tener baños, acuden con una vecina que les da permiso para usar suyo.
Tampoco tienen agua potable para beber ni para lavar sus manos.
Un solo maestro, que no recibe sueldo, atiende a 76 alumnos de los seis diferentes grados, así que les pone diferentes tareas.
Esta escuela depende de la Primaria “Heroico Colegio Militar”, ubicada en la Colonia Buenavista, dijo el director, Jorge René Ramos.
“Esta semana iniciamos en forma presencial, pero los maestros están trabajando desde agosto que inició el ciclo escolar, sin embargo, hasta la fecha no han percibido sueldo alguno, ya de hecho desistieron dos maestras por la necesidad, y solo nos queda el maestro Efraín”, expresó.
Tienen planeado conseguir baños móviles, pero si no se logra para este fin de semana, la próxima semana los padres de familia construirán una letrina, pese a que es peligroso para las y los alumnos.
“Estamos tratando de conseguir unos baños móviles para los niños, no tienen, de hecho, si no se consiguen para este fin de semana, vamos a construir una letrina para que los niños realicen sus necesidades fisiológicas”, dijo.
También consigue donativos como puede, para dar gel antibacterial, útiles escolares y uniformes al alumnado procedente de familias de muy escasos recursos económicos.
“Yo vengo con un granito de arena, amistades que me dicen ‘aquí está un garrafón de agua, llévate, aquí están marcadores, aquí está esto’, y se los traigo a los niños, se consiguió triplay para tapar las ventanas los días que hizo frío, compré yo papel granito para arreglar el techo”, manifestó Ramos.
El aula es prestada por su propietaria, y los fines de semana el maestro y padres de familia limpiaron, consiguieron los pupitres, desmontaron, pero falta que alguien se lleve la basura acumulada a las puertas del pequeño edificio.
El director comentó que hay un terreno cerca, en la misma colonia, donde había aulas de lámina y ahí era la escuela, pero con la tormenta de 17 de mayo, el viento voló todo.
La petición es que personas altruistas hagan donativos para levantar la escuela nuevamente.
“Está el terreno, que nos apoyaran con la construcción de dos aulas al menos para trabajar con tres y tres grados en cada una de ellas, no importa que sea de madera la escuela, los niños son lo primordial”, precisó el director.
“A la sociedad l digo, en lo que lo que nos puedan apoyar, los niños tienen muchas necesidades, o sea, son familias de escasos recursos, entonces yo ahorita pues anduve consiguiendo cuadernos, crayolas y material, todo lo que se pueda gel, mascarillas”.
