***Maestro de primaria, con sus recursos, lleva a niños del poniente a aprovechar las instalaciones deportivas del oriente de la ciudad, pues sus familias carecen de los medios para trasladarlos***
NUEVO LAREDO.- El profesor Gustavo César Ochoa Martínez es maestro frente a grupo en un escuela de las colonias Manuel Cavazos Lerma y Francisco Villa, consideradas de alto nivel de marginación, al poniente de la ciudad.
Ahí los niños tienen pocas opciones, rodeados de carencias y pandillas, mientras en la mayoría de los casos los padres están ausentes porque deben trabajar todo el día para solventar los gastos.
El profesor Ochoa Martínez va más allá de su trabajo como docente, a fin de darles más oportunidades a los niños. Tan pronto termina el horario escolar, sube a su vehículo a estudiantes de su grupo para llevarlos a practicar deporte a la Unidad Deportiva “Benito Juárez”.
“Soy maestro de doble turno, salgo a las 5:30 de la tarde y a esa hora vamos a entrenar a la pista de atletismo en la ‘Benito Juárez’, yo traslado a mis atletas en mi troca hasta el oriente, y ahí entrenamos de 6:30 a 8:30 de la tarde, dos horas diarias”, explicó.
Todos los días, atraviesa la ciudad desde el poniente hacia el oriente, lo hace con sus propios recursos económicos, pues quiere que los adolescentes puedan disfrutar de las instalaciones públicas, pagadas con dinero del pueblo, que sin su ayuda no sería posible porque están muy lejos de las colonias marginadas.
No es opción ir en camión, pues no tendrían dinero para pagarlo todos los días. Así que Ochoa Martínez se convierte en entrenador y transporte gratis.
“Yo me traslado en mi troca, me llevo 10, 15, 20 niños, apretados, pero ahí vamos todos para allá. Me preguntan que quién me paga, y no, a mí nadie me paga, yo lo hago por gusto”, aclaró.
Esta labor la realiza desde hace 22 años, cuando formó su club de atletismo del poniente, su logotipo es una tortuga que tiene alas en los pies, basado en la mitología griega.
Su objetivo es que no se desperdicie el talento de los jóvenes neolaredenses del poniente, sino que lo exploten porque eso los puede salvar de la delincuencia y los pone en el camino hacia una mejor calidad de vida.
Se le preguntó qué pediría a las autoridades, y dijo que equipo para que sus jóvenes estudiantes puedan continuar practicando el deporte, pero con mejores resultados.
“Mis tortuguitas del poniente son muy buenos niños, son muy buenos atletas, tenemos una carrera próxima de la Santísima Trinidad de 5 kilómetros, andamos preparando a los niños, hay carencias, sí hay carencias, en tenis, no tienen tenis.
“A veces la situación económica está un poco más dura, y yo me traslado en mi troca, yo le diría a las autoridades deportivas que nos apoyen un poquito en cuestión de las becas deportivas”, precisó Ochoa Martínez.
Las becas deportivas se dan solo a quienes ya han ganado campeonatos, pero los niños del poniente no pueden ganar campeonatos, pese a su gran talento, si no tienen lo necesario para entrenar.
“Desgraciadamente dicen hay que ganar a nivel estado, a nivel regional o nacional para que te puedan dar una beca, es un poco difícil, pero ahí tenemos que manejarlo con las autoridades que sean un poco más benévolas en ese sentido, que no pongan tantos requisitos.
“Hay mucha voluntad, hay muy buen material al poniente de la ciudad. Contra viento y marea sacamos al grupo adelante”, refirió, pero yo sé que la alcaldesa nos va a dar la mano”, comentó.